Hoy os traemos esta espectacular receta de croquetas de chipirones en su tinta. Una receta fácil de cocinar y muy vistosas en el plato ya que no son unas croquetas corrientes porque cuando las abres ¡son negras por dentro! Es un plato delicioso y que gusta a niños y mayores así que ¡manos a la obra!
Ingredientes para las croquetas
- 500 gr de chipirones (calamares pequeños)
- Huevos
- 1 Cebolla
- 1 Diente de ajo
- Harina
- Pan rallado
- Aceite de oliva
- 750 ml de leche
Elaboración
- Lo primero es limpiar bien los chipirones, tanto por fuera como por dentro, y aclarar bien con agua fría hasta que estén perfectamente limpios. También podemos pedir en la pescadería que nos los den ya limpios. Entonces sólo habrá que picarlos bien con cuidado de guardar los saquitos de tinta sin que se rompan y conservarla. Personalmente he pedido la tinta aparte en la pescadería y también te la pueden proporcionar ellos mismos y no preocuparte por nada, sólo tener que trocearlos.
- A continuación, picamos muy fino la cebolla y el ajo y los ponemos a pochar en una sartén con aceite de oliva. Cuando estén doraditos, añadimos los chipirones troceados y sofreímos durante unos minutos hasta que se cocine bien el pescado.
- Añadimos 4 cucharadas de harina sin parar de remover para crear un «roux» con la inteción de que se tueste la harina y pierda el sabor a crudo. A continuación, iremos añadiendo la leche caliente poco a poco y sin parar de remover para hacer la bechamel. Este paso nos llevará unos minutos así que sé paciente. Cuando veas que la bechamel se despega de las paredes de la sartén significa que ya está lista.
- Es el momento de teñir las croquetas de negro. Coge las bolsitas de tinta y añádelas a la sartén, remueve bien para que todo se mezcle de negro intenso. Se puede batir la mezcla para que quede todo homogéneo, o bien, dejarlo tal cual si prefieres encontrar «pedacitos». Esta cuestión es a elección del paladar de cada uno.
- Deja enfriar bien la bechamel y no la tapes hasta que se haya atemperado por completo. Luego envuélvela y guárdala en la nevera hasta el día siguiene.
- Colocamos dos platos, uno con pan rallado y otro con huevo batido y ponemos a calentar el aceite en la sartén. Ahora, con las manos limpias y mojadas le damos forma a las croquetas, las pasamos por huevo y después por el pan rallado y REPETIMOS EL PROCESO. Debemos sellarlas bien así que las volvemos a pasar por huevo y pan rallado.
- Por último, la temperatura del aceite para freír las croquetas es muy importante. Debe estar a una temperatura constante de 175º, sin que el aceite humee. Si el aceite está más frío de la cuenta, las croquetas se nos pueden abrir. Una vez dicho esto, sólo queda freirlas por tandas, colocarlas en un plato con papel absorbente, ¡y a comer!
Conoce algunos trucos adicionales para aprender a FREIR BIEN unas croquetas.
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